“Más allá de adoptar compromisos, es tiempo de seguir avanzando en el desarrollo de la economía circular. Es responsabilidad de la sociedad civil, políticos, empresa; es un reto de todos fortalecer la economía circular”.
Josep Bagué.
La economía circular es un sistema sostenible que busca nuevas fuentes de recursos y de energía para atender al desarrollo de todo el planeta. Es más eficiente durante los procesos de consumo y producción, utilizando materias primas renovables y de bajo impacto ambiental.
A diferencia de la economía lineal, la economía circular se basa en un proceso sostenible, en el que se intenta que los materiales y recursos se mantengan en el ciclo productivo, durante el mayor tiempo posible, sin perder su valor y conservando su vida útil.
La economía circular no desecha el producto final ni lo convierte en basura, todo lo contrario: lo utiliza como recurso para un nuevo ciclo de vida.
Promesa cumplida.
En Ecoplast cerramos el ciclo del plástico, para darle vida a nuevos productos, a partir de desechos plásticos. Quiere decir que nos basamos en la economía circular, en todas las fases de nuestros procesos. Reciclamos botellas y tapitas de plástico, para convertirlas en envases para alimentos reciclados, 100 % ecológicos.

Es importante porque es un modelo que realmente se basa en la generación de menos desechos; en un proceso de reciclaje real y total. Un producto de plástico en vez de llegar al mar, o al centro de desechos, llega a nuestra sede para ser transformado, y luego esos mismos envases se reciclan y se transforman nuevamente en un ciclo sin fin, que favorece al medioambiente.
Ecoplast es, en resumen, una empresa procesadora de materiales plásticos, con un sentido ecofriendly, que fundamenta sus bases en la economía circular.
Esta economía circular está inspirada en la naturaleza y busca establecer procesos que permitan reutilizar la materia prima, casi indefinidamente, a partir de los recursos renovables.
¿Qué significa?
Es un concepto económico que como define economiacircular.org, se relaciona con la sostenibilidad y plantea “cerrar el ciclo de vida” de productos, servicios, residuos y recursos renovables, para que mantengan su valor durante el mayor tiempo posible y reducir al mínimo la generación de residuos.
Entonces, ¿podemos ser circulares? Sí, con Ecoplast podemos ser y vivir bajo una economía circular. La sustitución de las bolsas plásticas por bolsas reutilizables o ecológicas, o la transformación de botellas de plástico, en envases ecoamigables son prácticas que conducen a estilos de vida circulares, basados en el uso compartido, la reutilización y el reciclaje.
Aspiración verde.
La economía circular aspira a modificar el modelo productivo insostenible de consumo, sin conciencia ambiental, para sustituirlo por uno que apunta a preservar, en todo momento, la mayor utilidad y valor de los productos, así como de sus componentes y materiales. El modelo económico actual que conocemos y practicamos es tomar o comprar, hacer y desechar o botar, agotando así los recursos naturales.
Si queremos alcanzar un desarrollo sostenible en nuestras ciudades debemos sumarnos y apoyar un modelo circular, limitando la producción de residuos, basándonos en: hacer, rehacer, usar y reutilizar, enfocándonos en energías renovables.
La economía circular busca mejorar la sociedad en la que vivimos, conseguir una rentabilidad duradera y compartida y, además, minimizar el impacto medioambiental de nuestra actividad diaria.
Principios básicos.
La economía circular es un nuevo modelo de producción y consumo sostenible. Es un cambio radical de perspectiva en las personas y en las empresas a la hora de hacer frente a la falta de recursos, el impacto ambiental, la creación de valor y el empleo. Se basa en estos tres principios:
- Eliminar residuos y reducir la contaminación.
- Mantener productos y materiales en uso.
- Regenerar sistemas naturales.
¿Cuál es el objetivo principal de este modelo económico? Es el valor de los productos, que los materiales y los recursos (agua, energía) se mantengan en el ciclo durante el mayor tiempo posible, y que se reduzca al mínimo la generación de residuos.
La producción debe aprovechar los residuos y disminuir los desechos, idealmente hasta cero. De esta forma, la tierra y el mar ya no funcionarían como depósito de basura, y se preservan sus condiciones naturales.
Son muchas sus ventajas, pero a continuación se resumen las más importantes:
- Reducción de los costos de producción por la utilización más eficiente de los recursos.
- Ahorros netos de costes de materias primas.
- Reducir la dependencia de los recursos primarios y finitos.
- Disminución de la cantidad de material que llega diariamente a los vertederos y a los mares. Por ejemplo, esto se logra usando y reutilizando los envases de Ecoplast.
- Generación de mayor empleo local, especialmente en puestos de trabajo de baja y media especialización, lo que permite afrontar el desempleo.
En Ecoplast promovemos una producción circular, una economía donde todo se reutilice, fundamentada en el nuevo uso, porque el futuro no es desechable ¡Piensa verde, piensa Ecoplast!